Por @EricSolano.
Bueno, dicen que jamás debes llegar tarde a una cita con una dama, aunque ella te haga esperar en la sala de su casa lo que parece una infinidad de tiempo. Lo mismo aplica con Inna.En un recinto abarrotado en el área colindante con el escenario, el Ecocentro en Querétaro estaba la mitad vacío, o la mitad lleno (como quiera verse). Esperar a Elena Alexandra Apostoleanu (Inna, para todos sus fans y Compañía disquera) implicó una antesala de tal vez dos horas esuchando a los DJ (montadiscos) Willy San Juan, Iván Mateluna, Joe Parra y DJ Pelos en un continuum que en los últimos minutos fue como una cortina con texturas desdoblándose en un caleidoscopio sonoro que se desplegaba y sintetizaba una y otra vez.. Sin previo anuncio la voz seminasal y dulzona de la cantante ¡Hola Querétaroooo! con una entonación impecable, esta diva de Hungría cantó, coqueteó, insultó sin insultar, jugó con su público más cercano y lejano (tal vez, no más de 30 metros). "¿Qué...? ¿que me amas y vienes con ella?... ¿qué?...¿tu hermana? ¡todos (los hombres) dicen lo mismo!..." (risas del público). ¡su público la adora!
Y nos quedamos con ganas de más. A pesar de que cantó "Amazing", "Hot", "Sun is up" y adornó su esenario durante unos segundos con la bandera de México y otro instante con un sorbo de tequila directo de la botella; de su simpático uso del idioma español y su cuerpo, esta morenita se quedó algo corta y no me refiero a su estatura y porporciones físicas (muy diferentes a la fotografía de su cartel publicitario). Esperarla dos horas o más para verla cantar una hora y no darnos el placer de un Encore... bueno, yo que puedo decirles si mi puntualidad esta vez falló y no pude estar en el área de prensa para fotografías (generalmente a escasos dos metros del escenario) Así como puedo exigir una noche larga con Inna. ¡Que se lo exijan sus fans que sí pagaron por un muy buen lugar!
Mejor me quedo mudo por que en este momento aún resuena en mi cabeza su talento, su perfección técnica y sus palabras que poco a poco se van entretejiendo en un caleidoscoio con la canción que sonaba en la radio cuando regresé al auto para abandonar el lugar... Eddie Brickel cantaba "I quit... I give up... When I´m all alone its the best way to be... when I´m by myself, nobody else can say goodbye!...
¡Ah!, ¡por cierto!, Inna traía una camiseta con la frase impresa "If you want the best, fight for it" ("Si quieres lo mejor, lucha por obtenerlo".
